jueves, 18 de julio de 2019

Esta lengua nuestra tan divertida y sorprendente.

El rincón de Isaías.

Que este idioma nuestro, el español, es bien simpático y curioso muchos lo sabemos. Pero veamos qué hace tan apasionante a esta lengua de 27 letras.


Que las mayúsculas y las minúsculas. Que los verbos en pasado, presente o futuro. Que las palabras sinónimas, o sea las que son parecidas; que las antónimas, que son las contrarias; que las agudas, graves y esdrújulas, que llevan tilde dependiendo de donde se haga el acento y tantas cosas más propias de nuestra lengua.

Que los trabalenguas que aprendimos de niños o los juegos de palabras, más la sintaxis, la ortografía, los modismos o los palíndromos, que son las palabras o frases que se leen igual al derecho o al revés, como reconocer o sometemos, que se afirma son las palabras más largas de este tipo o como “dábale arroz a la zorra el abad”, una de las frases más conocidas del idioma con esta característica.

Que el español, es idioma oficial en países de los cinco continentes, porque mínimo, en cada uno, hay al menos uno, donde se habla nuestra lengua materna. En Europa, es fácil adivinar: ¡Olé! En África es oficial en dos países: Marruecos y Guinea Ecuatorial. En Asia se habla en Filipinas y en Oceanía se habla español en la Isla de Pascua. Es considerado el segundo idioma del mundo por el número de gente que lo habla como lengua materna, unos 442 millones de personas, solo superado por el idioma mandarín Chino, en este aspecto.

Que en los años 974-978 -no hay aún una fecha exacta-, un monje del monasterio de San Justo y San Pastor en La Rozuela -León-, fue el autor del primer texto escrito en español. Lo curioso del asunto es que no se trataba del escribano de aquel lugar contando la vida de los monjes, sino que se dedicó a hacer “una lista de gastos de la cocina”. El texto fue denominado Nodicia de Kesos, porque allí contaba, cómo se habían ido gastando los quesos de aquel monasterio.

Que se dice que el castellano cuenta actualmente con unas 300.000 palabras o conceptos diferentes. Aunque en la RAE, que es como la Santa Sede del idioma español, solo recogen 88.000. Y aunque pueda parecer una cifra muy importante, es nada si la comparamos con las 350.000 palabras del inglés.

La sede de la Real Academia de la Lengua está ubicada en Madrid, España, junto al Museo del Prado. Es la entidad que se encarga de normalizar el uso de la lengua española.
Foto tomada de minube.com

Que todo junto se escribe separado y separado se escribe todo junto. Que la hache es muda, pero vaya y no la ponga cuando se requiere para que vea el grito que le pegan por ignorante. Que la W fue la última letra en ser agregada al español en el año 1969. Que en 1994, se decidió que las letras CH y LL, ya no eran bienvenidas en nuestro alfabeto y les dieron de baja como letras oficiales. Que la única palabra que tiene cinco erres es ferrocarrilero, que las palabras ecuatorianos y aeronáuticos poseen las mismas letras, pero en diferente orden y se conoce como anagrama y que mil es el único número que no tiene ni O ni E.

Que hay más, mucho más por conocer de nuestro idioma. Que la palabra alopecia, que se refiere a la caída o pérdida del cabello, procede de alṓpēx-ekos o zorra y todo porque este animal muda el pelo con frecuencia. El vocablo cinco tiene a su vez cinco letras, coincidencia que no se registra en ningún otro número. En aristocráticos, cada letra aparece dos veces. La palabra oía tiene tres sílabas en tres letras. Las palabras más largas sin letras repetidas son Calumbrientos (13), Centrifugados (13) y Vislumbrándote (14).

Que en cambio la palabra más larga recogida por la RAE tiene 23 letras y es electroencefalografista. Que la única palabra que contiene dos veces cada una de las cinco vocales es guineoecuatorial y que hay cuatro palabras que tienen cuatro consonantes seguidas: transplantar, substraer, abstraer y abstracto. O que además el término estuve contiene cuatro letras consecutivas por orden alfabético: stuv y que algunas de las palabras más raras que contiene el castellano son: amover, barbián, jipiar, orate, vagido… ¡A ver pues quién se le mide a decir qué significan!

El Pequeño Larousse Ilustrado, que de pequeño no tiene nada, contiene más de 60 mil palabras, con acepciones y locuciones del idioma español y es permanente fuente de consulta a todos los niveles.
Foto tomada de mercadolibre.com

Que el árabe es de gran influencia en nuestro idioma porque casi más de 4.000 palabras nos vienen de allí, por el tiempo de dominación que tuvieron, lo que representa un 8% de nuestro vocabulario actual y que cada vez que decimos la palabra ojalá, en realidad estamos invocando a Alá, porque ojalá, viene de la expresión “lawsha’aAllah”.

Que un español, usa una media de unas 300 palabras. Una persona culta, aumenta la cantidad llegando a las 500 diarias y un periodista o escritor puede alcanzar las 3.000. Y que Miguel de Cervantes llegó a utilizar unas 8.000 palabras diferentes en su obra.

El español Miguel de Cervantes Saavedra, nacido en Alcalá de Henares, es considerado la máxima figura del idioma castellano y su obra, "El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha", es, para muchos, la principal obra literaria del idioma español.
Foto tomada de colombiaaprende.edu.co

Que las letras que más utilizamos los españoles en nuestro día a día son la E, con el 16.78%; seguida por la O, con el 11.96%; la L, con el 8.69% y la S, con el 7.88%. En cambio la W, la misma que dijimos fue la última en ingresar, es la menos usada con el 0.01%. ¡Qué pesar!

Que hay una palabra que puede ser nombrada, pero no puede ser escrita. Se trata del singular del imperativo ‘salidle’, el cual se escribiría ‘salle’, pero en dicho caso se pronunciaría sá-lle, y no sal-le, que es como estaría bien dicha. Y sabían que varias encuestas han determinado que la frase/coletilla que más nos molesta a los españoles es “¿me entiendes?”, puesto que cuestiona la inteligencia del receptor.

Que dentro de los miles de trabalenguas que hay en el español, muchos que nos enseñaron en la niñez, hay uno muy conocido que tiene diferentes adaptaciones y variaciones y dice: Pedro Perico Pereyra, pobre pintor portugués, pinta preciosas paredes por poca plata papel... pero para pagar, pasa Pascuas pescando peces. Pobres pececillos, piden piedad, pero pierden.

Que hasta el palito de la Ñ tiene nombre y se llama virgulilla Y que aquí podemos amanecer contando todas las rarezas de nuestra lengua materna, pero ya fue suficiente, de tanto decir que…¿Me entiendes?

No es más por hoy. Ahí les quedo…

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